"Belleza"

¿Qué es la belleza?

Para mi la belleza es esta flor.

Su forma, color, fragancia,...

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La belleza podemos contemplarla en cualquier cosa, en cualquier ser. Tan solo hemos de mirar más allá de lo que vemos.

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La belleza está en el corazón, en el alma.

La belleza del cuerpo es como un viajero, un trotamundos, que hoy está aquí y mañana...

*

Pero la belleza del corazón es eterna.

Ciclo vital

Hay poco más que un suspiro, entre el límite de esta vida y la siguiente.

Si no sé si estaré aquí a la mañana siguiente,

¿por qué intentar engañar a la muerte con esquemas vitales de un futuro permanente?

Perdida

A veces ella se siente perdida.

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Rodeada de gente, habla, le hablan,

rie, llora, camina, se para, ya es de noche,

duerme, se levanta, busca, investiga,

se siente sóla, está cansada, se vuelve a parar,

se cae, se levanta, abraza,

camina, camina, camina, camina, camina, camina, camina,... silencio, escucha, cambia de rumbo,

da vueltas, se marea, se vuelve a caer,

perdida, perdida, perdida, perdida, perdida, perdida, perdida,...

en suspensión, flotando en el espacio, sin rumbo ni dirección.

*

A veces ella se siente perdida.

Bendición

Todas las cosas fluyen en Orden Divino y cada cambio o vuelco que nos da la vida contiene una bendición.

Gracias a la vida

Gracias a la vida que me ha dado tanto.
Me dio dos luceros que, cuando los abro,

perfecto distingo lo negro del blanco,

y en el alto cielo su fondo estrellado

y en las multitudes el hombre que yo amo.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Me ha dado el oído que, en todo su ancho,

graba noche y día grillos y canarios;

martillos, turbinas, ladridos, chubascos,

y la voz tan tierna de mi bien amado.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Me ha dado el sonido y el abecedario,

con él las palabras que pienso y declaro:

madre, amigo, hermano, y luz alumbrandola

ruta del alma del que estoy amando.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Me ha dado la marcha de mis pies cansados;

con ellos anduve ciudades y charcos,

playas y desiertos, montañas y llanos,

la casa tuya, tu calle y tu patio.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Me dio el corazón que agita su marco

cuando miro el fruto del cerebro humano;

cuando miro el bueno tan lejos del malo,

cuando miro el fondo de tus ojos claros.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Me ha dado la risa y me ha dado el llanto.

Así yo distingo dicha de quebranto,

los dos materiales que forman mi canto,

y el canto de ustedes que es el mismo canto

y el canto de todos, que es mi propio canto.

Gracias a la vida que me ha dado tanto.

Violeta Parra